Después de retrasar el comienzo de la venta de entradas para el próximo Festival de Eurovisión hasta esta misma semana, la KAN ha decidido suspender temporalmente la nueva oleada ante diferentes irregularidades detectadas por la televisión pública israelí durante esta primera tanda.
La emisora nacional de Israel ha ordenado que se detenga la venta de entradas para el Festival de Eurovisión después de que los sistemas de supervisión y control contratados por la KAN hayan identificado un intento por varias partes para intervenir en el proceso de venta. En este proceso se ha detectado un elevado número de compra de los mejores asientos para oficialidades de las comunicaciones y los deportes, en lugar de ser destinados al público en general.
Mientras la televisión esclarece qué sucedió exactamente durante el proceso de venta de entradas, se detiene la venta de cualquier tipo de billete. Si finalmente se confirma que las entradas fueron adquiridas de un modo ilegal, la KAN las bloqueará y las volverá a abrir para la venta al público.
Debido al rápido período de tiempo en el que se agotaron las entradas, los comentarios y dudas acerca de una posible especulación sobre la validez las ventas ha planeado sobre la KAN. El ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdan, también ha alertado a la policía con el fin de detener la venta ilegal de entradas en sitios web de reventa. Arden ha afirmado que «la especulación con las entradas es un fenómeno feo e ilegal«.
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